LOS VERDADEROS HIJOS DE DIOS

El pecado no debe tener cabida en la vida del Cristiano. Ese pecado debe ir desapareciendo día a día de nuestras vidas, a medida que CRECEMOS ESPIRITUALMENTE a través del discipulado, y de cada enseñanza en la iglesia, así como de la lectura y la meditación de SU PALABRA en nuestro DEVOCIONAL DIARIO. Nosotros NO podemos practicar el pecado y punto. 

⁶Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido. ⁷Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo. ⁸El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. ⁹Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. ¹⁰En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. ¹¹Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros. - I Juan  3:6-11 

Si las cosas no son así, estaremos desobedecemos a Dios y somos “Practicantes” del pecado y es algo delicado sobre lo cual tendremos que meditar a fin de sopesar nuestra salvación. 

El proceso natural de una persona nacida de nuevo es que la simiente de Dios permanezca en él y que lo aleje permanentemente del pecado. 

Una de las manifestaciones más claras en la vida de los hijos de Dios, es el amor por sus hermanos y en llevar una vida justa. 

Si realmente no vemos esto en la vida de una persona, es bueno reconsiderar su Salvación. 

Oremos para que el Señor nos ayude a luchar contra aquellas áreas débiles de nuestras  vidas, que aún nos inducen a pecar y que nos avergüenzan delante de ÉL.

Varias verdades para MEDITAR profundamente: 

• Considerar a CONCIENCIA cada una de NUESTRAS ACTUTUDES, el PECADO no debe TENER CABIDA en nosotros. Que se vea
• Despojarnos POR COMPLETO de todo INDICIO de PECADO. Esa es la verdadera Santificación PROGRESIVA.
• Si somos nacidos de nuevo à No tenemos porqué practicar el pecado
• Si somos nacidos de nuevo à No debemos pecar vez tras vez.
• Un hombre que se considere hijo de Dios debe manifestar la justicia en todos los actos de su vida
• El verdadero creyente se manifiesta por el amor hacia sus hermanos. 

Los verdaderos hijos de Dios no PRACTICAMOS el pecado 

1. Si nuestra vida es una vida de pecado, es porque no hemos conocido a Dios (Vs 6)

2. Si practicamos el pecado, no somos de Dios porque las obras del diablo permanecen en el pecador practicante (Vs 7-8)

3. Si somos hijos de Dios NO PRACTICAMOS el pecado y el AMOR de Dios debe manifestarse en nuestro diario vivir (Vs 9-11) 

Dios nos recuerda hoy que los verdaderos hijos de Dios no practican el pecado. Quien nos habla es un Dios MOTIVADOR quien día a día nos muestra la realidad del verdadero creyente, aquél que se aleja del pecado. Un Dios que nos motiva a AMAR y amar y amar a nuestros hermanos como verdaderos hijos suyos. 

Realmente impacta ver la forma tan clara como Dios aclara que quien está en el verdadero Camino, NO puede practicar el pecado. 

Esto es para aplicarlo día a día, minuto a minuto, aborreciendo más y más toda manifestación de pecado y amando más profundamente a nuestros hermanos, sintiendo su dolor como si fuera nuestro dolor, sintiendo sus necesidades como si fueran nuestras necesidades, entregando aún nuestra propia vida por ellos, siendo LUZ en medio de un mundo de tinieblas. 

Manifestemos nuestra condición de HIJOS de DIOS 

Fabio