LA IMPORTANCIA DE EVANGELIZAR YA MISMO

Dios nos recuerda una vez más esas condiciones para la salvación y la responsabilidad tan grande de cumplir con la Gran Comisión que él nos ha dejado. Veamos: 

⁸Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos:⁹que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. ¹⁰Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. ¹¹Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado. ¹²Porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan; ¹³porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo. ¹⁴¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¹⁵¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas! - Romanos 10:8-15 

Es necesario entender que el SER SALVO es una decisión PERSONAL, nuestro deber es ir y PREDICAR el Evangelio a toda criatura, pero es cada persona la que tiene en sus manos el creer o no creer, es obra del Espíritu Santo y no de nosotros. 

Es necesario mostrarle a cada persona que cada uno debe confesar con su boca y con su corazón al Señor Jesucristo como su Salvador. No podemos hacerlo por los demás. Dios nos da su promesa de que, si creemos en ÉL, no seremos avergonzados y es una promesa para TODO el mundo, para todos los que le invocamos. 

No tenemos que dudar de su Palabra por un momento. La gente necesita creer, pero para creer tienen que oír, y para que oigan debe haber alguien que les predique, y ese alguien que les predique debe ser una persona preparada, con la certeza de que Dios le ha mostrado toda la verdad y que para eso lo ha puesto como su testigo. 

Que bendición tan grande poderle obedecer a Dios predicando su Evangelio, llevando las buenas nuevas. A quien vamos ya Dios lo ha visitado de alguna manera y lo tiene dispuesto para escuchar el Evangelio y ser salvo. Es obra de Dios.

Varias RECOMENDACIONES que la mayoría conocemos, pero no las practicamos al 100%: 

• Cumplir con la responsabilidad de PREPARAR a los que vayan a PREDICAR, para que la gente OIGA y pueda CREER.
• Hacer MI tarea de PREDICAR… y ORAR y esperar para que DIOS HAGA EL RESTO.
• Es necesario confesar con la boca y con el corazón.
• Es decisión personal el arrepentirse, confesar sus pecados, confesar la Obra de Cristo y aceptarlo en su corazón.
• Entender claramente las condiciones para ser SALVO.
• No desconfiar por un momento de las promesas de salvación para los que hemos depositado nuestra FE en ÉL
• Confiar plenamente en que Dios no permitirá que seamos avergonzados.
• Obedecerle a Dios entendiendo que la gente necesita oír para creer
• Cumplir con la tarea que Dios nos ha dado de predicar el Evangelio a toda criatura
• Aceptar el llamado que Dios nos ha hecho al enviaros como sus embajadores
• Tener la tranquilidad de que nuestros pies son hermosos, porque hemos ido, obedeciendo el llamado de Dios. 

La importancia de EVANGELIZAR 

1. Se necesita de Arrepentimiento de corazón y FE plena para ser SALVOS (Vs 8-10)

2. Dios no hace acepción de personas, la salvación es ofrecida a todos (Vs 11-13)

3. Dios nos ha dado la tarea de ser los PREGONEROS de las buenas nuevas, TODOS deben OIR (Vs 14-15) 

Dios nos recuerda hoy, agosto de 2021, en medio de un caos completo, cuáles son las condiciones para la SALVACIÓN y la tarea de Evangelizar. Es una enseñanza que viene de un Dios de GRACIA, que nos da ese precioso regalo de la salvación por medio de la FE y luego nos comisiona la tarea de llevar esas buenas nuevas a todo el mundo. 

Particularmente me impacta entender que no es simplemente confesarlo con la BOCA, sino que hay que creerlo en el CORAZÓN. Y ver la forma tan clara como Dios encadena el creer con el oír, y el oír con la predicación, y la predicación con el llamado a llevar el Evangelio. 

Hermanos, esto es para ponerlo en práctica YA MISMO, predicando el Evangelio al punto de que la gente entienda con el corazón, a fin de que no sea una profesión de fe más, pero sin ningún efecto real; sintiendo que realmente mis pies son hermosos porque estoy cumpliendo con la misión que Dios me ha dejado. 

Nosotros le obedecemos a Dios: Nos preparamos, vamos, predicamos; el resto lo hace Dios. ¿Qué esperamos para ir? 

Fabio