LA MIRADA PERMANENTE DE DIOS

Dios ha estado en control de cada ser viviente desde el mismo momento de su fecundación, y aún desde siempre, porque todo está dentro de sus planes indescriptibles. Job nos recuerda hoy la misericordia de Dios, y cómo ÉL todo lo ve. 

¹¹ Me vestiste de piel y carne, Y me tejiste con huesos y nervios. ¹² Vida y misericordia me concediste, Y tu cuidado guardó mi espíritu. ¹³Estas cosas tienes guardadas en tu corazón; Yo sé que están cerca de ti. ¹⁴ Si pequé, tú me has observado, Y no me tendrás por limpio de mi iniquidad. ¹⁵ Si fuere malo, ¡ay de mí! Y si fuere justo, no levantaré mi cabeza, Estando hastiado de deshonra, y de verme afligido. ¹⁶ Si mi cabeza se alzare, cual león tú me cazas; Y vuelves a hacer en mí maravillas. ¹⁷ Renuevas contra mí tus pruebas, Y aumentas conmigo tu furor como tropas de relevo. - Job 10:11-17 

Y realmente así es, Cada milímetro de nuestra piel, cada polvo de nuestros huesos, cada uno de nuestros nervios, uñas, cabellos, TODO, absolutamente todo ha sido diseñado y creado por ÉL. 

Existimos y somos lo que somos solamente por la misericordia y el amor de Dios. Somos de Él, existimos por Él, vivimos por ÉL, hemos sido rescatados por pura misericordia, Él nos ha regalado la vida física y la VIDA ETERNA, por su cuidado hemos sido renacidos, por su cuidado nos ha dado su Santo Espíritu y ahora somos nuevas criaturas. 

El trabajo que Dios ha hecho sobre nosotros, sus hijos, es inmensurable, jamás podremos llegar a dimensionarlo, de esta manera, debemos VALORARLO y agradecerlo, sirviéndole fielmente todos los días de nuestra vida, entendiendo que cada situación que vivamos ha sido permitida por ÉL, y está siendo controlada por ÉL.          

Así que nada de amarguras y de quejas, nada de afán, que haya en nosotros siempre ese CONTENTAMIENTO al saber que tenemos un Dios que nos hace todas las PROMESAS que un ser humano pueda esperar de parte de ÉL (Salmo 34:17: Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias). 

Dios siempre está a nuestro lado y conoce perfectamente cada uno de nuestros pensamientos, de nuestras miradas, de nuestras intenciones, de nuestras actitudes. A ÉL no podemos esconderle absolutamente NADA. Nuestro deber es llevar una vida SANTA, entendiendo que ÉL siempre está ahí, acompañándonos, observándonos, aconsejándonos, y si no lo oímos y caemos, ÉL nos reprochará, pero si fuésemos justos y santos, ÉL nos escuchará, y se glorificará en nosotros, porque ÉL es misericordioso y compasivo.

Que bonitos los Mandamientos y promesas que Dios nos recuerda hoy: 

• Entender que SIEMPRE los OJOS DE DIOS ME ESTÁN MIRANDO, y que ÉL pondrá las PRUEBAS NECESARIAS.
• NO dejar de CLAMAR A DIOS, siendo JUSTO en TODO. 
• Reconocer la Sabiduría y el poder de Dios en la misma creación de nuestro cuerpo
• Valorar la grandeza de Dios, la vida que nos dio y la misericordia que ha tenido de nosotros.
• Valorar el cuidado espiritual y físico que ha tenido de nosotros
• Confiar plenamente en nuestro Amado PADRE y no desconfiar de sus promesas.
• Entender que Dios está siempre, siempre conmigo y que vigila cada uno de mis pasos
• Comprender que cuando peco, ÉL inmediatamente lo sabe y toma medidas
• Ser consciente de que si soy justo, Él inmediatamente lo ve, y su actitud hacia mi será de ayuda y compasión.
• Ser SANTOS en TODA nuestra manera de vivir, confesar nuestras faltas y suplicar su ayuda para cambiar inmediatamente.           

La MISERICORDIA de Dios, ÉL todo lo ve 

1. Dios ha estado en cada detalle de nuestras vidas (Vs 11-13)

2. Dios ve nuestro pecado y santidad (Vs 14-15)

3. Él siempre está presto a tendernos Su Mano, para bendición o para reprensión (Vs 16-17) 

Dios trae hoy nuevamente a nuestra mente, SU MISERICORDIA, recordándonos que ÉL todo lo ve, ÉL es un Dios SABIO que entiende perfectamente el por qué hace lo que hace con cada uno de nosotros. Dios no se equivoca, porque ÉL conoce perfectamente nuestros corazones, nuestros pensamientos, nuestras intenciones, nuestras actitudes, y actúa de acuerdo a lo que nos conviene… Dios no se equivoca. 

Es impactante ver la grandeza de Dios y su gran misericordia, especialmente conmigo, contigo, y con cada uno de sus hijos. 

Los invito a aplicarlo, entendiendo que somos los más bienaventurado de todos los hombres, y siendo agradecido con Dios todos los días de nuestra vida, los favores que hemos recibido de ÉL, son totalmente inmerecidos, empezando por nuestra salvación; descansando plenamente en las DECISIONES de Dios, sin refunfuñar en lo más mínimo. Dios no se equivoca, ÉL sabe perfectamente porqué permite cada situación que tenemos que vivir, ASÍ debemos entenderlo y aceptarlo. 

Fabio